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Jose Luis Solans Nuño
2023.01.30
CUANDO LA COMIDA PASA A SER ALGO SECUNDARIO...
Sitio realmente curioso. Magnífica atención, de hecho es exclusiva. un comedor privado en el que no menos de cuatro ni más de 8 comensales deciden música, temperatura, tonalidad e intensidad de luz... muy agradable y perfecto para una reunión de amigos. Pero cuando hablamos de comida la cosa cambia. Menú degustación nada especial y que no puedas encontrar en cualquier restaurante asiático. Rollitos de primavera, gyozas, pollo al curry, etc muy normalito y nada especial. Una carta de vinos inexistente, sólo una alternativa para el blanco y dos o tres para el tinto. En definitiva, un rato muy agradable con una comida muy corriente. 5 comensales con dos botellas de tinto y una de blanco 410 € propina incluida.